lunes, 19 de septiembre de 2016

La lista definitiva de consejos de ArchDaily para futuros estudiantes de arquitectura

La lista definitiva de consejos de ArchDaily para futuros estudiantes de arquitectura

publicado por Plataforma Arquitectura


Milstein Hall de OMA en la Universidad de Cornell muestra la atmósfera dinámica de una escuela de arquitectura; ya que mientras algunos estudiantes tienen seminarios y criticas en la planta baja, otros estudiantes van por encima de ellos. La imagen © Mateo Carbone
La escuela de arquitectura. Ya has oído los mitos. Las leyendas de noches en vela e innovación, de la adicción al trabajo sin igual y el amor por la profesión. Tal vez sabes lo que quieres: resolver el gran problema de la urbanización, crear la próxima maravilla sostenible, o tal vez sólo iniciar tu propia oficina y mostrarle al mundo de la arquitectura realmente cómo se hace. Quizás no tienes ni idea de lo que quieres hacer, atraído a la arquitectura por el romance, la escala mayor a la vida. Tal vez eres un artista que quiere un trabajo cuando te gradúes. Un héroe local, que está a punto de ser lanzado en un salón de clases de los mejores, posiblemente por primera vez en tu vida. Estarás rodeado por los más brillantes en ingeniería, la resolución de problemas, la escritura, el dibujo y una serie de otras habilidades. Ansioso y excitado, estás sobre las puertas de la enseñanza de la arquitectura, con hambre de innovación y listo para compartir y aprender de los demás. Al entrar en ese primer día, te preparas para los mejores, y más difíciles, momentos de tu vida hasta ahora.
Para prepararte para la extraña bestia que es la escuela de arquitectura, arrojar luz sobre lo que es realidad y ficción, y entregarte un poco de tranquilidad, nosotros en ArchDaily hemos preparado una lista de consejos para todos los estudiantes novatos de arquitectura. No hay otro tipo de educación en el mundo como la de arquitectura, y esperamos que esta lista pueda ayudarte a prepararte para sus maravillas y desafíos únicos. Los consejos está destinados a facilitar la transición a la escuela tanto como sea posible, pero ten cuidado, nada se puede comparar a experimentar la verdadera aventura. Léelos todos a continuación.



Revisión de primer año. Imagen © Ien Boodan

APROVECHA AL MÁXIMO TU TIEMPO
La escuela es lo que hacemos de ella, por lo que haz tu mejor esfuerzo.

Haz preguntas: (lo más probable) es que nunca más estés en este tipo de entorno de aprendizaje y rodeado de tantos intelectuales, así que aprovéchalo

Aprende por tu cuenta: a pesar de que aprenderás de tus profesores y compañeros de taller, es importante enseñarte a ti mismo las cosas que no siempre se incluyen en el plan de estudios. Internet es el hogar de un hermoso y magnífico tesoro (y constantemente actualizado) de tutoriales.
Revisión de primer año. Imagen © Jeff So


Organiza y cataloga tu investigación: utiliza Mi ArchDaily. En la era digital, la información puede ser excesiva y abrumadora. Tomarse el tiempo para organizar su investigación no sólo refina los resultados, pero ayuda a desarrollar tu gusto y puede servir como una herramienta en el futuro.
Viaja: Nada se puede comparar a la experiencia de una ciudad o un edificio en persona, y se verá bien en tu curriculum vitae.
Lee todo lo que puedas: utiliza la biblioteca de tu escuela para pasar a través de revistas y libros. Sigue los RSS de tu sitio favorito.

Una charla en Brooklyn. Imagen © Ien Boodan
Visita ArchDaily en busca de inspiración: ¡Es para lo que estamos!
No tengas miedo de cuestionar a tus maestros: puede ser tentador ganar el favor de tus tutores por hacer todo lo que dicen, pero hay muchas maneras de acercarse a la arquitectura, y convertirse en un clon de otra persona no es siempre la mejor manera. Tu vas a producir una arquitectura más interesante e individual, aprendiendo de tus maestros, pero también poniéndolos en duda de vez en cuando.
Persevera: la frustración será parte de tu vida cotidiana en el taller de arquitectura. Cada año pondrá a prueba tu determinación de continuar en la profesión, pero si te gusta el trabajo, mantén la mente en el futuro.



Revisión de primer año. Imagen © Steven Lin
Se paciente: escuchar a un colega arrogante o profesor podría ser un trabajo duro, pero siempre hay algo que aprender, incluso si es sólo lo que no se debe hacer.
Crea libremente: las escuelas están ahí para abrir nuestra mente. No dejes que otros la cierren. Con frecuencia es difícil encontrar razones para algunas decisiones arquitectónicas. Sólo cree en tu voluntad. Sólo tienes cinco años de total libertad experimental.

© 

Ien Boodan

Anda a clases: aunque esto puede parecer una obviedad, a menudo los estudiantes de arquitectura se saltan las conferencias para trabajar en proyectos de taller. No sólo te estás privando de un descanso de taller y una educación completa, es la peor forma de faltar el respeto a tus profesores que han pasado tiempo preparando sus clases.
Mantente ocupado: aunque el tiempo de inactividad es raro, encuentra un problema resoluble y medible para trabajar en cuanto lo tengas. Participa en concursos o trata de resolver los problemas de tu entorno inmediato, como hacer tu taller más amigable con el medio ambiente.



Una cafetería organizada por estudiantes. Imagen © Jeff So
MANTÉN LA CORDURA Y SE SALUDABLE
La escuela de arquitectura puede ser agotadora, pero serás mucho más eficaz como estudiante en pleno funcionamiento que como un zombi con exceso de trabajo.
No seas competitivo: la escuela es sobre el aprendizaje, no se trata de superar a tus compañeros de clase. El modo de pensar mediante la comparación de tu trabajo con el de los demás en un campo creativo no sólo es absurdo, pero peligroso
Duerme un poco: no hay nada romántico o bueno de trabajar como esclavo toda la noche en un proyecto. Con un buen manejo del tiempo y trabajo duro, todas las noches en vela pueden ser evitadas. A veces, es posible encontrar que es inevitable, pero trata de no hacer un hábito de ello.



Un torneo de dodgeball organizado por estudiantes. Imagen © Jeff So
Únete a un equipo de fútbol / disco volador / croquet / baile / etc: el ejercicio y el tiempo fuera del taller le hace bien a un cuerpo. ¿Alguien quiere jugar Dodgeball?
Compra sabiamente: algunas universidades te pedirán que aparezcas con lápices, bolígrafos, escuadras, carboncillos, acuarelas, y costosos libros. La arquitectura es uno de los títulos más caros en sí mismo, por lo que cuando estés empezando, lo mejor es esperar y ver lo que vas a usar en realidad.



© Jeff So
Disfruta de cada nuevo proyecto: cada proyecto debe ser un largo momento de alegría y diversión. Cambia la mentalidad de diferenciar trabajo y vacaciones, la arquitectura debe ser simultáneamente el más grande amor y desafío en tu vida.
Mantente con energía: ten comidas completas en los momentos adecuados siempre que sea posible. Cuando no es así, asegúrate de mantener colaciones saludables disponibles: una lata de almendras y castañas de cajú, o una caja de clementinas puede salvar tu vida.



© Ien Boodan

Cocina: llévate almuerzo y cena si es que puedes. No se necesita mucho más tiempo para cocinar un poco más. Cerca de las entregas, la preparación puede ahorrar dinero y te dará tiempo extra para taller.
Haz amigos: la importancia de un sistema de apoyo, y la sencilla compañía de los demás no puede ser subestimada. No caigas en la trampa del genio solitario; podrías perder la oportunidad de amistades de por vida y, posiblemente, socios de negocios.

 
Milstein Hall de OMA en la Universidad de Cornell muestra la atmósfera dinámica de una escuela de arquitectura; ya que mientras algunos estudiantes tienen seminarios y criticas en la planta baja, otros estudiantes van por encima de ellos. La imagen © Mateo Carbone

SE UN BUEN VECINO DE TALLER
Se trata de personas que trabajarán contigo entre 4-5 años, ¡así que deja una buena impresión!
Respeta a los demás: a menos que se te haya dado permiso explícito, no toques las maquetas de otras personas y no husmees en sus cosas sobre su escritorio. Suena como sentido común, pero a veces la curiosidad puede ganarte.
Respeta el espacio: mantén le taller como un lugar para el trabajo. La escuela de arquitectura puede ser divertida, y es fácil distraerse por buenos amigos después de muchas y largas horas de trabajo. Sin embargo, deja la diversión (especialmente si es fuerte) en otras partes de la escuela donde la gente no está tratando de hacer su trabajo. Recibe las llamadas afuera y escucha música con auriculares.

El (rara vez) taller vacío. Imagen © Ien Boodan

Mantén ropa de repuesto / desodorante en tu casillero de estudio: no hay verdadero sustituto para una ducha, pero tus colegas agradecerán tu consideración.
Una lata de mentas puede ayudar mucho: pueden ayudar con todo, desde largas noches hasta el aliento de café y creación de contactos.
Dejar en claro cuando quieres trabajar: nada dice mejor, "no molestar", como una sudadera con capucha y auriculares.


© Ien Boodan
PREPÁRATE PARA EL FUTURO
Esto no sólo te ayuda a facilitar tu vida después de graduarte, también aprenderás más sobre la profesión y mejorar en la escuela.
Construye tu red de contactos: tus compañeros de clase son el recurso más importante para la colaboración. ¿Qué mejor momento para pedirles ayuda que cuando las consecuencias son la menos graves?
Mantén tus opciones abiertas: la escuela es una oportunidad para el ensayo y error. La enseñanza de la arquitectura es una de múltiples facetas, a menudo se promociona como el último título de artes liberales. Muchos de los graduados van hacia prácticas multidisciplinares: moda, diseño gráfico, diseño industrial y publicación son sólo algunas de las opciones.



Una exposición de trabajo de primer año. Imagen © Steven Lin
Construye: ofrécete como voluntario para el Hábitat para la Humanidad o intenta involucrarte con los programas que van con la experiencia. Un conjunto de dibujos en una hoja de papel no te enseñarán la belleza de una pared de ladrillo perfectamente colocada, o la elegancia de una conexión de madera. Cada vez más escuelas están adoptando talleres de diseño / construcción, donde tendrás la oportunidad de aprender más acerca de cómo construir realmente. Si tienes la oportunidad, ¡toma uno de esos talleres!
Aprende a escribir: la escritura es una habilidad invaluable en la arquitectura que está estrechamente relacionada con el éxito de la comunicación de ideas de diseño. Escribe. Edita. Repete. Una mejor articulación a menudo resulta en un proceso de diseño más claro y desarrollarás una mejor apreciación de lo que decir durante las revisiones y críticas mediante la práctica por escrito.



Una noche de poesía organizada por estudiantes. Imagen © Ien Boodan
Mantente humilde: la mayor trampa de la escuela de arquitectura es creer que son mejores que otros. Reconoce que siempre serás un estudiante en constante aprendizaje. Estás aquí para proporcionar un servicio a los demás, no vigiles celosamente tus ideas ni mires en menos a los que no entienden el "buen diseño".